Barenboim se retira a Kareol - Boletín #301

Daniel Barenboim fue el dueño de Tristán e Isolda en el Festival de Bayreuth de la década de los ochenta y los noventa. Ningún otro director alcanzó su nivel con ese título aquellos años en el Festspielhaus, porque nadie más que él lo dirigió. Encadenó dos producciones consecutivas, algo poco habitual en Bayreuth. La de Jean-Pierre Ponnelle de 1981, en pie hasta 1987. Y, tras un largo descanso de seis años, volvió entre 1993 y 1999, esta vez con Heiner Müller. El estreno de esta segunda representación fue vitoreado con más de 20 minutos de aplausos, uno de los más largos del Festival. El director argentino compartió el reconocimiento con los protagonistas a los que dieron vida Siegfried Jerusalem y Waltraud Meier, una de las parejas wagnerianas habituales de los noventa.

 

Este es el boletín número 301 de la Guía del Festival de Bayreuth enviado el 4 de noviembre de 2022. Si no quieres perderte ninguno, no lo dudes y suscríbete ya.