La peluquería de Bayreuth - Boletín #158

El objetivo de Alexander Gehs es que su trabajo pase desapercibido. Él lidera el departamento de maquillaje y peluquería del Festival de Bayreuth para conseguir que los cantantes desaparezcan en sus personajes. No se considera un artista, sino un ejecutor de las ideas escénicas que cada ópera requiera. Una peluca, de unos 200 gramos, puede llevar una elaboración de más de 50 horas y se realiza con pelo natural, mucho más caro que el sintético, pero que aguanta mejor las altas temperaturas. Su profesión ha cambiado en los últimos años desde que las retransmisiones de ópera han llegado al cine, y los primeros planos de los cantantes obligan a unos acabados perfectos en la caracterización de los personajes. Por suerte para Gehs, trabajar para el Festival permite un largo tiempo de preparación, que puede llegar a un año antes del estreno de una nueva producción, al contrario que las pocas semanas disponibles en cualquier otro teatro.