El director de cine Werner Herzog apenas había asistido a una docena de funciones de ópera en su vida cuando en 1986, desde el Comunale Bolonia, le encargaron la escena para una nueva producción de “Doctor Faust”, la inacabada ópera del italiano Ferruccio Busoni. El director de “Nosferatu” aceptó la propuesta y su resultado llamó la atención de Wolfgang Wagner. Tan solo un año de después del estreno boloñés, Herzog se convirtió en el primer director de cine en debutar en el Festival de Bayreuth, con una producción de Lohengrin, que estaría en cartel hasta 1993. Después, y ya fuera del Festspielhaus, se animaría con otros títulos wagnerianos como Der fliegende Holländer, Tannhäuser o Parsifal, que se han podido ver en ciudades como Sevilla y Valencia.
Este es el boletín número 331 de la Guía del Festival de Bayreuth enviado el 9 de junio de 2023. Si no quieres perderte ninguno, no lo dudes y suscríbete ya.