Yunques y martillos - Boletín #268

Wagner recurrió al uso de martillos y yunques en varios momentos de El Anillo del Nibelungo. En el prólogo, El oro del Rin, el compositor especificó que debía haber 18 yunques de distintos tamaños afinados en fa, repartidos por el foso orquestal y el escenario para generar un efecto estereofónico, antes siquiera de que ese concepto existiera. En Sigfrido, el yunque sube a la escena para que el héroe fragüe en él su maltrecha espada Nothung. Y pudo existir una tercera ópera con presencia de yunques si Wagner hubiera completado su proyecto “Wieland, el herrero”, del que llegó a escribir un boceto en prosa en 1850, y al que finalmente puso música, aun en vida de Richard, el compositor eslovaco Ján Levoslav Bella.

 

Este es el boletín número 268 de la Guía del Festival de Bayreuth enviado el 11 de marzo de 2022. Si no quieres perderte ninguno, no lo dudes y suscríbete ya.